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Ternera Guisada en Olla Rápida: ¡Lista en Minutos con Esta Receta Sencilla!

En el corazón de la cocina casera, pocos platos evocan tanta calidez y tradición como un buen guiso de carne. Y cuando el tiempo apremia, pero el deseo de un plato reconfortante persiste, la olla rápida se convierte en nuestra mejor aliada. Este artículo te guiará a través de una receta detallada para preparar una deliciosa carne de ternera guisada en olla rápida, un plato que combina la sencillez de la preparación con la profundidad de sabor que solo un guiso a fuego lento puede ofrecer, pero en una fracción del tiempo. Olvídate de largas horas en la cocina; con esta receta, disfrutarás de un estofado de ternera tierno y jugoso en mucho menos tiempo, perfecto para cualquier día de la semana.

Ingredientes para un Guiso de Ternera en Olla Rápida Perfecto

La calidad de los ingredientes es fundamental para un guiso exitoso. A continuación, detallamos cada componente, explicando las opciones y por qué cada uno es importante:

Carne de Ternera (800g - 1 kg): Para guisar, las mejores opciones son cortes como laaguja, la falda, el morcillo o la carrillera. Estos cortes, aunque pueden ser más económicos, tienen un mayor contenido de colágeno, que con la cocción lenta (o rápida en olla a presión) se transforma en gelatina, aportando una textura melosa y un sabor profundo al guiso. Evita cortes demasiado magros como el solomillo o el lomo, ya que tienden a resecarse durante la cocción prolongada. Pide a tu carnicero que te prepare la carne en trozos de unos 3-4 cm, tamaño ideal para que se cocine uniformemente y se mantenga jugosa.
Cebolla (2 medianas): La base aromática de cualquier buen guiso. La cebolla blanca o amarilla son las más comunes y versátiles. Córtala en brunoise (dados pequeños) para que se deshaga durante la cocción, integrándose en la salsa y aportando dulzor y profundidad.
Zanahorias (3 medianas): Aportan dulzor natural y un toque de color vibrante al guiso. Córtalas en rodajas gruesas o en trozos irregulares, según tu preferencia. Si son zanahorias baby, puedes dejarlas enteras.
Pimiento (1 verde o rojo, o medio de cada): El pimiento añade un sabor ligeramente dulce y herbáceo. El pimiento verde tiende a ser más amargo, mientras que el rojo es más dulce. Puedes usar ambos para un equilibrio de sabores. Retira las semillas y las partes blancas interiores antes de cortarlo en trozos similares a los de la zanahoria.
Ajo (2-3 dientes): Otro pilar aromático esencial. Pica finamente el ajo o lamínalo según tu gusto. El ajo picado se integra más en la salsa, mientras que laminado aporta un sabor más pronunciado.
Tomate triturado o natural (400g): El tomate aporta acidez, color y cuerpo a la salsa. Puedes usar tomate triturado en conserva o tomate natural maduro rallado. Si usas tomate natural, asegúrate de que esté bien maduro para obtener el máximo sabor dulce y evitar la acidez excesiva.
Vino Tinto (200ml): El vino tinto es un ingrediente clave para un guiso de ternera sabroso. Aporta complejidad, profundidad y un toque ácido que equilibra la riqueza de la carne. Utiliza un vino tinto de calidad media, como un Rioja, un Ribera del Duero o un vino de mesa decente. Evita vinos de cocina, ya que suelen ser de baja calidad y pueden afectar negativamente el sabor final. Si prefieres no usar vino, puedes sustituirlo por caldo de carne adicional.
Caldo de Carne (500ml - 750ml): El caldo de carne es fundamental para la cocción y para crear una salsa rica y sabrosa. Utiliza un caldo de carne de buena calidad, preferiblemente casero o uno envasado bajo en sal. Si no tienes caldo de carne, puedes usar caldo de pollo o incluso agua, aunque el sabor será menos intenso. La cantidad de caldo puede variar ligeramente según el tipo de olla rápida y la consistencia que desees para la salsa.
Aceite de Oliva Virgen Extra: Para sofreír las verduras y sellar la carne. El aceite de oliva virgen extra aporta sabor y es más saludable que otros aceites vegetales.
Harina de Trigo (1 cucharada sopera): Opcional, para espesar ligeramente la salsa. Si prefieres una salsa más ligera, puedes omitirla.
Hierbas Aromáticas:Laurel (1-2 hojas) y Tomillo (1 ramita fresca o 1 cucharadita seca) son clásicos en los guisos de ternera y aportan un aroma cálido y reconfortante. Otras opciones incluyenromero, perejil fresco picado al final, o incluso unas hebras de azafrán para un toque especial.
Sal y Pimienta Negra Molida: Para sazonar al gusto. Es importante sazonar en varias etapas de la cocción para potenciar el sabor de todos los ingredientes.
Opcional: Patatas (2-3 medianas) o Setas (200g): Las patatas y las setas son excelentes complementos para un guiso de ternera. Si usas patatas, córtalas en trozos grandes y añádelas a la olla junto con el caldo. Si usas setas, puedes añadirlas hacia el final de la cocción para que no se deshagan demasiado. Las setas shiitake, boletus o champiñones son buenas opciones.

Preparación Paso a Paso: Receta de Carne de Ternera Guisada en Olla Rápida

Preparación de la Carne: Salpimienta generosamente los trozos de ternera por todos lados. Si deseas, puedes enharinar ligeramente la carne (opcional, ayuda a espesar la salsa). Calienta un poco de aceite de oliva virgen extra en la olla rápida (sin la tapa puesta) a fuego medio-alto. Sella la carne en tandas, dorándola por todos los lados hasta que esté bien marrón. Este paso es crucial para sellar los jugos y aportar sabor al guiso. Retira la carne de la olla y reserva.
Sofrito de Verduras: En la misma olla, añade un poco más de aceite de oliva si es necesario. Baja el fuego a medio y añade la cebolla picada. Sofríe durante unos 5-7 minutos, hasta que esté transparente y empiece a dorarse. Añade el ajo picado y cocina durante 1 minuto más, hasta que desprenda su aroma. Ten cuidado de no quemar el ajo, ya que amargaría el guiso.
Incorporación del Resto de Verduras y Tomate: Añade las zanahorias y el pimiento troceados a la olla. Sofríe durante unos 5 minutos más, removiendo ocasionalmente. Incorpora el tomate triturado o rallado y cocina durante unos 5-10 minutos, hasta que el tomate haya perdido su acidez y se haya concentrado ligeramente. Este sofrito lento y bien cocinado es la base del sabor del guiso.
Desglasar con Vino Tinto: Vierte el vino tinto en la olla, sube el fuego a alto y deja que hierva durante 1-2 minutos, raspando el fondo de la olla con una cuchara de madera para despegar los jugos caramelizados que se hayan pegado durante el sellado de la carne y el sofrito. Este proceso, llamado desglasado, añade una gran profundidad de sabor a la salsa. Deja que el alcohol del vino se evapore ligeramente durante unos minutos.
Cocción a Presión: Vuelve a añadir la carne reservada a la olla. Incorpora las hojas de laurel y el tomillo. Vierte el caldo de carne hasta cubrir la carne, o al menos hasta 2/3 de la capacidad de la olla rápida (consulta las instrucciones de tu olla). Sazona con sal y pimienta negra al gusto. Cierra la olla rápida siguiendo las instrucciones del fabricante. Sube el fuego a alto hasta que la olla alcance la presión (verás que la válvula sube o empieza a salir vapor, según el modelo de olla). Una vez alcanzada la presión, baja el fuego a medio-bajo para mantener la presión constante y cocina durante20-25 minutos para olla rápida tradicional o 12-15 minutos para olla súper rápida. El tiempo exacto puede variar ligeramente según el tamaño de los trozos de carne y el tipo de olla.
Liberación de Presión y Finalización: Una vez transcurrido el tiempo de cocción, retira la olla del fuego y deja que la presión se libere de forma natural (esto puede tardar unos 10-15 minutos).Importante: Nunca fuerces la liberación de presión en una olla rápida tradicional a menos que las instrucciones de tu olla lo indiquen específicamente y sepas cómo hacerlo de forma segura. En las ollas súper rápidas modernas, la liberación de presión suele ser más rápida y segura siguiendo las instrucciones del fabricante. Una vez que la presión se haya liberado completamente y la válvula haya bajado, abre la olla con cuidado.
Comprobar la Ternura de la Carne y Rectificar Sazón: Prueba la carne para asegurarte de que esté tierna y se deshaga fácilmente con un tenedor. Si aún está un poco dura, puedes volver a cerrar la olla y cocinar a presión durante unos minutos más. Prueba la salsa y rectifica de sal y pimienta si es necesario. Si la salsa está demasiado líquida, puedes retirarla un poco de la olla y reducirla en una sartén aparte a fuego medio-alto hasta que espese al punto deseado, o puedes dejar la olla abierta a fuego lento unos minutos para que se reduzca ligeramente. Si usas harina, puedes disolver una cucharadita de harina en un poco de caldo frío y añadirlo a la olla, removiendo bien, para espesar la salsa. Deja cocer unos minutos más para que la harina se cocine y espese la salsa.
Servir: Sirve el guiso de ternera caliente, acompañado de guarniciones clásicas como puré de patatas, arroz blanco, patatas fritas, o simplemente con pan crujiente para mojar en la deliciosa salsa. Espolvorea perejil fresco picado por encima para decorar y añadir un toque de frescura.

Consejos y Trucos para un Guiso de Ternera en Olla Rápida Excepcional

Calidad de la Carne: Como se mencionó anteriormente, elige cortes de ternera adecuados para guisar. La calidad de la carne influye directamente en el sabor final del plato. Si es posible, elige carne de ternera de pasto o de razas autóctonas, que suelen tener más sabor.
Sellado de la Carne: No saltes el paso de sellar la carne. Aunque pueda parecer un paso adicional, el sellado a alta temperatura crea una costra sabrosa en la superficie de la carne, que aporta sabor y ayuda a retener los jugos en el interior, resultando en una carne más tierna y jugosa. Asegúrate de que la olla esté bien caliente y de no sobrecargarla con demasiada carne a la vez, ya que esto bajaría la temperatura y la carne se cocería en lugar de dorarse. Sella la carne en tandas si es necesario.
Sofrito Lento y Bien Cocinado: Un buen sofrito es la base de un guiso sabroso. Sofríe las verduras a fuego lento, dándoles tiempo para que se caramelicen y desarrollen sus sabores. No tengas prisa en este paso. Un sofrito bien hecho marca la diferencia entre un guiso mediocre y uno excepcional.
El Vino Tinto: No escatimes en la calidad del vino tinto. Un buen vino tinto aporta complejidad y profundidad de sabor al guiso. Si no tienes vino tinto, puedes usar vino blanco seco o incluso cerveza negra para variaciones de sabor. Si prefieres no usar alcohol, puedes sustituirlo por caldo de carne adicional o zumo de uva roja sin alcohol.
El Caldo: Utiliza caldo de carne de buena calidad. El caldo casero es siempre la mejor opción, pero si no tienes tiempo, utiliza un caldo envasado bajo en sal o pastillas de caldo de buena calidad. Evita los caldos demasiado salados o con sabores artificiales. El caldo de hueso de ternera también es una excelente opción para un guiso más rico y nutritivo.
Hierbas Aromáticas y Especias: Experimenta con diferentes hierbas aromáticas y especias para personalizar tu guiso. Además del laurel y el tomillo clásicos, puedes añadir romero, orégano, pimentón dulce o picante, comino, clavo, o incluso un poco de canela para un toque exótico. Añade las hierbas secas al principio de la cocción para que liberen su sabor, y las hierbas frescas al final para un aroma más fresco.
La Olla Rápida: Familiarízate con tu olla rápida y sigue las instrucciones del fabricante. Cada olla puede tener tiempos de cocción ligeramente diferentes. Asegúrate de usar la cantidad adecuada de líquido y de no sobrepasar la capacidad máxima de la olla. La olla rápida no solo ahorra tiempo, sino que también concentra los sabores y cocina la carne de forma muy tierna.
Tiempos de Cocción: Los tiempos de cocción indicados son orientativos. El tiempo exacto puede variar según el tipo de olla rápida, el tamaño de los trozos de carne y la dureza de la carne. Es mejor quedarse corto al principio y comprobar la ternura de la carne. Si aún está dura, puedes volver a cocinar a presión durante unos minutos más. Es más fácil añadir tiempo de cocción que quitarlo.
Espesar la Salsa: Si prefieres una salsa más espesa, puedes usar harina, maicena o incluso pan rallado para espesarla. También puedes reducir la salsa dejándola cocer a fuego lento sin tapa al final de la cocción. Otra opción es triturar parte de las verduras cocidas con un robot de cocina o batidora de mano y volver a añadirlas a la olla para espesar la salsa de forma natural.
Congelar el Guiso: El guiso de ternera en olla rápida se puede congelar muy bien. Una vez que se haya enfriado completamente, guárdalo en recipientes herméticos y congélalo hasta por 3 meses. Para descongelar, déjalo en el frigorífico durante la noche o descongélalo en el microondas. El guiso congelado puede incluso mejorar en sabor, ya que los sabores se intensifican con el tiempo.
Variaciones: Esta receta es una base excelente que puedes adaptar a tus gustos y preferencias. Puedes añadir otras verduras como champiñones, guisantes, judías verdes, o incluso frutos secos como almendras o nueces para un toque diferente. También puedes variar las especias y hierbas aromáticas para crear diferentes perfiles de sabor. Por ejemplo, puedes añadir pimentón ahumado y chorizo para un guiso con sabor español, o curry en polvo y leche de coco para un guiso con influencia asiática.

La Olla Rápida: Un Aliado en la Cocina Moderna

La olla rápida, a menudo subestimada, es una herramienta culinaria excepcional que merece un lugar destacado en cualquier cocina moderna. Más allá de simplemente acelerar los tiempos de cocción, la olla rápida ofrece una serie de ventajas que la convierten en la elección ideal para preparar guisos y estofados, especialmente cuando se busca sabor y eficiencia.

Ahorro de Tiempo Significativo: La ventaja más evidente de la olla rápida es la drástica reducción del tiempo de cocción. Lo que tradicionalmente requeriría horas de cocción lenta en una olla convencional, se puede lograr en cuestión de minutos en una olla rápida. Esto es especialmente valioso en el ajetreo de la vida moderna, donde el tiempo es un recurso precioso. Para platos como el guiso de ternera, la olla rápida reduce el tiempo de cocción en más de la mitad, permitiéndote disfrutar de platos ricos y complejos incluso en días laborables.

Concentración de Sabores: La cocción en un entorno cerrado y a alta presión en la olla rápida permite que los sabores se concentren de manera excepcional. Al reducirse la evaporación de líquidos, los sabores de los ingredientes se intensifican y se fusionan de forma más profunda. El resultado es un guiso con un sabor más rico y complejo, como si hubiera sido cocinado a fuego lento durante horas.

Textura Perfecta de la Carne: La olla rápida es ideal para cocinar cortes de carne más duros y económicos, como los utilizados en este guiso de ternera. La alta presión y la temperatura aceleran la descomposición del colágeno en la carne, transformándola en gelatina y resultando en una carne increíblemente tierna y jugosa que se deshace en la boca. La olla rápida logra este resultado en mucho menos tiempo que los métodos de cocción lenta tradicionales.

Conservación de Nutrientes: La cocción rápida en la olla rápida ayuda a preservar mejor los nutrientes de los alimentos. Al reducirse el tiempo de cocción y la exposición al oxígeno, se minimiza la pérdida de vitaminas y minerales sensibles al calor. Esto convierte a la olla rápida en una opción más saludable para cocinar, especialmente verduras y legumbres.

Eficiencia Energética: Aunque la olla rápida requiere una fase inicial de calentamiento a alta potencia, una vez que alcanza la presión, la cocción se realiza a baja potencia, consumiendo menos energía que la cocción prolongada en una olla convencional. Esto no solo es beneficioso para el medio ambiente, sino también para tu factura de electricidad o gas.

Versatilidad en la Cocina: La olla rápida no se limita solo a guisos y estofados. Es una herramienta muy versátil que se puede utilizar para una amplia variedad de platos, desde legumbres y arroces hasta sopas, cremas, verduras al vapor e incluso postres. Con un poco de práctica, la olla rápida puede convertirse en un elemento indispensable en tu cocina.

Seguridad Moderna: Las ollas rápidas modernas están diseñadas con múltiples sistemas de seguridad que las hacen mucho más seguras que las ollas a presión antiguas. Válvulas de seguridad, sistemas de liberación de presión y cierres herméticos garantizan una cocción segura y sin riesgos. Es importante, sin embargo, leer y seguir las instrucciones del fabricante para un uso seguro y correcto de la olla rápida.

En resumen, la olla rápida es mucho más que un simple electrodoméstico para ahorrar tiempo. Es una herramienta culinaria que mejora el sabor, la textura y el valor nutricional de los alimentos, al tiempo que ofrece eficiencia y versatilidad en la cocina moderna. Dominar el uso de la olla rápida abre un mundo de posibilidades culinarias y te permite disfrutar de platos deliciosos y saludables en menos tiempo y con menos esfuerzo.

El Guiso de Ternera: Un Clásico con Historia y Variaciones

El guiso de ternera, en sus múltiples formas y variaciones, es un plato fundamental en la gastronomía de numerosas culturas alrededor del mundo. Desde sus orígenes humildes como forma de aprovechar cortes de carne menos nobles, hasta convertirse en un plato reconfortante y festivo, el guiso de ternera ha recorrido un largo camino, adaptándose a ingredientes locales y gustos regionales.

Orígenes y Evolución: Los guisos, en general, son una de las formas más antiguas de cocinar alimentos. Surgieron como una necesidad de ablandar cortes de carne duros y aprovechar al máximo los ingredientes disponibles. La cocción lenta y prolongada en líquidos permitía transformar cortes de carne menos tiernos en platos sabrosos y nutritivos. El guiso de ternera, en particular, se popularizó en muchas culturas europeas, donde la carne de vacuno era un alimento básico. A lo largo de la historia, el guiso de ternera ha evolucionado, incorporando nuevas verduras, hierbas aromáticas y técnicas de cocción, pero manteniendo su esencia como plato reconfortante y familiar.

Variaciones Regionales: Cada región y país tiene su propia versión del guiso de ternera, reflejando los ingredientes y sabores locales. EnFrancia, el "Boeuf Bourguignon" es un clásico mundialmente conocido, elaborado con vino tinto de Borgoña, champiñones, cebollitas francesas y panceta. EnIrlanda, el "Irish Stew" combina ternera con patatas, zanahorias, cebollas y a veces cebada perlada. EnBélgica, el "Carbonnade Flamande" se cocina con cerveza belga, cebolla y pan de especias. EnEspaña, existen numerosas versiones regionales, como el estofado de ternera a la jardinera, con una gran variedad de verduras, o el estofado de ternera a la riojana, con chorizo y pimiento choricero. EnLatinoamérica, también encontramos guisos de ternera con influencias locales, como el "Locro" andino, que incorpora patatas, maíz y calabaza, o el "Ajiaco" colombiano, con pollo (aunque también existen versiones con ternera), patatas y guascas.

Ingredientes Clave y Técnicas Comunes: A pesar de las variaciones regionales, existen algunos ingredientes y técnicas comunes en la mayoría de los guisos de ternera. Lacarne de ternera, preferiblemente cortes para guisar, es el ingrediente principal. Lasverduras, como cebolla, zanahoria, pimiento y tomate, son la base aromática y nutritiva del guiso. Ellíquido de cocción, que puede ser caldo de carne, vino, cerveza o agua, es fundamental para crear la salsa y ablandar la carne. Lashierbas aromáticas y especias, como laurel, tomillo, romero, pimentón y pimienta, añaden sabor y complejidad. La técnica de cocción lenta, ya sea en olla convencional o en olla rápida, es esencial para lograr una carne tierna y una salsa rica y sabrosa.

El Guiso de Ternera en la Cocina Contemporánea: Aunque el guiso de ternera es un plato tradicional, sigue siendo muy relevante en la cocina contemporánea. Su versatilidad, su sabor reconfortante y su valor nutricional lo convierten en una opción popular para comidas familiares y ocasiones especiales. La olla rápida ha revitalizado el guiso de ternera, permitiendo prepararlo de forma rápida y eficiente sin sacrificar el sabor. En la actualidad, los chefs y cocineros caseros siguen explorando nuevas variaciones del guiso de ternera, incorporando ingredientes innovadores y técnicas modernas, pero manteniendo siempre la esencia de este plato clásico y atemporal.

Valor Nutricional del Guiso de Ternera: El guiso de ternera, cuando se prepara con ingredientes frescos y equilibrados, puede ser un plato nutritivo y saludable. Aportaproteínas de alta calidad de la carne de ternera, esenciales para la construcción y reparación de tejidos. Lasverduras añadenvitaminas, minerales y fibra. El caldo de carne, especialmente el caldo de hueso, aportacolágeno y otros nutrientes beneficiosos para la salud articular y digestiva. Para hacer el guiso aún más saludable, se puede reducir la cantidad de grasa utilizando cortes de carne magros, eliminando el exceso de grasa durante la cocción y utilizando aceite de oliva virgen extra con moderación. También se pueden añadir más verduras y legumbres para aumentar el contenido de fibra y nutrientes.

En conclusión, el guiso de ternera es mucho más que una simple receta. Es un plato con historia, tradición y variaciones culturales que reflejan la diversidad gastronómica del mundo. Su sabor reconfortante, su valor nutricional y su versatilidad lo convierten en un clásico atemporal que sigue disfrutándose en las mesas de todo el mundo, adaptándose a los gustos y necesidades de cada época.

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