Lograr un arroz blanco perfecto y suelto, similar al que se disfruta en los auténticos restaurantes chinos, es un objetivo culinario al alcance de todos. Si bien puede parecer una tarea sencilla, conseguir esa textura ideal, donde cada grano se mantiene individual y esponjoso, requiere atención a ciertos detalles clave. Olvídese de la idea simplista de que solo se trata de hervir agua y añadir arroz. La verdad es que la preparación del arroz chino, en particular el arroz blanco que sirve de base para numerosos platos, es un arte que combina ciencia y técnica culinaria.
El primer paso fundamental reside en la selección del arroz. No todos los arroces son iguales, y para obtener ese resultado suelto y característico del arroz chino, debemos optar por variedades específicas. La clave está en buscar arroces degrano largo. Estos tipos de arroz contienen una mayor proporción de amilosa, un tipo de almidón que, al cocinarse, contribuye a que los granos se mantengan separados y no se aglutinen.
Entre las opciones más recomendables, destacan:
Evite el arroz de grano corto o medio, como el arroz bomba o el arroz para risotto. Estos tipos de arroz tienen un mayor contenido de amilopectina, otro tipo de almidón que los hace más cremosos y pegajosos, ideales para paellas y risottos, pero no para el arroz chino suelto que buscamos.
Una vez seleccionado el arroz adecuado, el siguiente paso, y quizás uno de los más importantes para asegurar la soltura, eslavarlo correctamente. Este proceso, que puede parecer trivial, tiene una razón científica fundamental: eliminar el exceso de almidón superficial presente en los granos de arroz.
El almidón liberado durante la cocción es el principal responsable de que el arroz se vuelva pegajoso. Al lavar el arroz, eliminamos este almidón suelto, lo que permite que los granos se cocinen de forma individual y no se adhieran entre sí.
¿Cómo lavar el arroz correctamente?
Este paso, aunque requiere un poco de tiempo adicional, es una inversión que se traduce en un arroz notablemente más suelto y de mejor textura.
Determinar la proporción adecuada de agua y arroz es otro factor crítico para el éxito. Demasiada agua resultará en un arroz blando y pasado, mientras que poca agua dará como resultado un arroz crudo y duro. La proporción ideal varía ligeramente según el tipo de arroz, pero una buena regla general es la siguiente:
Proporción estándar: 1 taza de arroz por 1.5 tazas de agua.
Para arroces como el Jazmín o el Basmati, esta proporción suele funcionar muy bien. Sin embargo, es importante tener en cuenta que factores como la antigüedad del arroz (el arroz más viejo tiende a necesitar un poco más de agua) y la potencia de su cocina pueden influir ligeramente. Es posible que necesite ajustar la proporción ligeramente en sus próximas preparaciones hasta encontrar el punto perfecto para su equipo y tipo de arroz específico.
Medición Precisa: Utilice tazas medidoras para asegurar la precisión tanto del arroz como del agua. La consistencia en la medición es fundamental para obtener resultados repetibles.
Existen diferentes métodos para cocer arroz, pero para el arroz chino suelto, el método deabsorción en olla es el más comúnmente utilizado y efectivo. Este método consiste en cocinar el arroz en la cantidad justa de agua, de forma que toda el agua sea absorbida por el arroz durante la cocción, sin necesidad de escurrirlo al final.
Pasos para cocer arroz chino en olla (método de absorción):
Si bien hemos centrado nuestra atención en el arroz blanco básico, la cocina china ofrece una rica variedad de platos a base de arroz, cada uno con sus propias técnicas y particularidades. El arroz blanco suelto es la base para muchos de ellos, pero la versatilidad del arroz en la gastronomía china va mucho más allá.
Arroz Frito (Chow Fan): Uno de los platos más populares y conocidos de la cocina china a nivel mundial. Se elabora con arroz cocido (preferiblemente del día anterior), huevos, verduras, carne o marisco, y salsa de soja. La clave de un buen arroz frito es cocinarlo a fuego alto y remover constantemente para que quede seco y ligeramente tostado. Existen innumerables variaciones de arroz frito, desde el clásico arroz frito con pollo hasta versiones más elaboradas con gambas, cerdo asado (char siu) o incluso piña.
Congee (Jook): Una especie de sopa o gachas de arroz, muy popular en el desayuno en muchas partes de Asia. El congee se cocina con una gran cantidad de agua, a fuego lento y durante un tiempo prolongado, hasta que el arroz se deshace y forma una consistencia cremosa. Se puede consumir solo o con una variedad de acompañamientos salados, como carne picada, pescado, huevos centenarios (huevos de pato conservados) o verduras encurtidas.
Arroz Glutinoso (Nuo Mi Fan): También conocido como arroz dulce o arroz pegajoso, el arroz glutinoso es una variedad de grano corto con un alto contenido de amilopectina, lo que le confiere una textura muy pegajosa al cocinarse. Se utiliza en platos dulces y salados, desde postres como el zongzi (paquetes de arroz glutinoso rellenos y cocidos al vapor en hojas de bambú) hasta platos principales como el arroz glutinoso con pollo al vapor.
Arroz al Vapor: En muchas regiones de China, especialmente en el sur, el arroz al vapor es una forma común de cocinar el arroz blanco. Este método, que requiere una vaporera o una olla con un accesorio para vaporizar, produce un arroz muy tierno y esponjoso. Se considera una forma más saludable de cocinar el arroz, ya que se cocina solo con vapor, sin necesidad de añadir aceite.
Fideos de Arroz (Mi Fen): Aunque técnicamente no son arroz cocido, los fideos de arroz son un ingrediente fundamental en la cocina china, elaborados a partir de harina de arroz. Existen diferentes tipos de fideos de arroz, desde los finos vermicelli hasta los anchos fideos planos. Se utilizan en sopas, salteados y platos fríos, ofreciendo una alternativa versátil al arroz en grano.
En resumen, dominar la técnica para cocer arroz blanco suelto es solo el comienzo de un viaje fascinante a través del mundo del arroz en la cocina china. Experimentar con diferentes variedades, métodos de cocción y platos le abrirá un universo de sabores y texturas, permitiéndole disfrutar plenamente de la riqueza y diversidad de la gastronomía china.