El nombre de Pelayo Bezanilla, frecuentemente asociado al gigante de las bebidas Coca-Cola, emerge como una figura clave en la configuración de estrategias y la gestión de la comunicación dentro de una industria en constante evolución. Su trayectoria, desde sus inicios en el periodismo y el servicio público en Chile hasta su posición como director de Asuntos Públicos y Comunicación de Coca-Cola Iberia, ofrece una perspectiva valiosa sobre las dinámicas internas de la compañía y su interacción con el entorno socioeconómico.
La carrera de Pelayo Bezanilla se caracteriza por una versatilidad notable, transitando entre el periodismo, la gestión pública y la comunicación corporativa. Su formación como periodista le proporcionó una base sólida para comprender los mecanismos de la comunicación masiva y la importancia de la narrativa en la construcción de la imagen de una organización. Su experiencia en el gobierno chileno, como subdirector de la secretaría de Comunicaciones entre 2010 y 2012, le brindó una visión interna del funcionamiento del Estado y las complejidades de la gestión de la información en el ámbito público.
En 2012, Bezanilla se unió a Coca-Cola Chile como director de Asuntos Públicos y Comunicación, marcando el inicio de su trayectoria dentro de la compañía. Este rol le permitió aplicar sus conocimientos y habilidades en un contexto empresarial, enfrentándose a los desafíos de comunicar los valores y las estrategias de una marca global en un mercado específico. Su ascenso dentro de la organización culminó con su nombramiento como director de Comunicación y Asuntos Públicos de Coca-Cola Iberia, una posición de liderazgo que le otorga una influencia considerable en las operaciones de la compañía en España y Portugal.
Como director de Comunicación y Asuntos Públicos de Coca-Cola Iberia, Pelayo Bezanilla desempeña un papel crucial en la definición e implementación de la estrategia de comunicación de la compañía. Su responsabilidad abarca una amplia gama de áreas, incluyendo la gestión de la reputación corporativa, la comunicación con los medios de comunicación, la relación con los grupos de interés y la promoción de iniciativas de sostenibilidad.
Uno de los desafíos más importantes que enfrenta Bezanilla es la necesidad de adaptar la comunicación de Coca-Cola a un entorno en constante cambio. Las preocupaciones sobre la salud pública, el impacto ambiental y la responsabilidad social corporativa han cobrado mayor relevancia en los últimos años, obligando a las empresas de bebidas a repensar sus estrategias y a comunicar de manera más transparente y efectiva. En este contexto, la labor de Bezanilla es fundamental para asegurar que Coca-Cola Iberia responda a las demandas de los consumidores y de la sociedad en general.
Una de las estrategias clave impulsadas por Coca-Cola Iberia bajo la dirección de Bezanilla es la reducción del contenido de azúcar en sus bebidas. Esta iniciativa responde a la creciente preocupación de los consumidores por los efectos negativos del consumo excesivo de azúcar en la salud. La compañía ha invertido en investigación y desarrollo para crear nuevas fórmulas con menor contenido de azúcar o edulcorantes alternativos, ofreciendo a los consumidores una gama más amplia de opciones.
Según declaraciones de Pelayo Bezanilla, Coca-Cola está adaptando la composición de sus bebidas para reducir o eliminar su contenido de azúcar. Desde el año 2000, Coca-Cola ha reducido en España un 38% el contenido de azúcar por litro en todo el portfolio de sus bebidas. Esta estrategia refleja un compromiso con la salud pública y una voluntad de adaptarse a las nuevas tendencias del mercado.
Otra de las estrategias clave impulsadas por Coca-Cola Iberia es la diversificación de su portafolio de productos. La compañía busca evolucionar hacia una "compañía total de bebidas", capaz de ofrecer a los consumidores una alternativa para cada situación y para cada necesidad. Esto implica la introducción de nuevas bebidas en categorías como agua, zumos, tés y bebidas deportivas, ampliando el alcance de la marca y atrayendo a nuevos consumidores.
Pelayo Bezanilla ha explicado que el nuevo enfoque estratégico busca la evolución hacia una compañía total de bebidas, capaz de ofrecer a los consumidores una alternativa para cada situación y para cada necesidad. Esta estrategia responde a la creciente demanda de los consumidores por una mayor variedad de opciones y a la necesidad de adaptarse a las nuevas tendencias del mercado.
Además de su rol en Coca-Cola Iberia, Pelayo Bezanilla ha desempeñado un papel importante en la Asociación de Bebidas Refrescantes (ANFABRA), la principal organización que representa a la industria de bebidas refrescantes en España. En julio de 2018, Bezanilla fue nombrado presidente de ANFABRA, sucediendo a John Rigau, vicepresidente de PepsiCo. Este nombramiento refleja el reconocimiento de su liderazgo y su experiencia en el sector.
Como presidente de ANFABRA, Bezanilla ha asumido la responsabilidad de defender los intereses de la industria de bebidas refrescantes ante las autoridades y la opinión pública. Su labor abarca una amplia gama de temas, incluyendo la regulación del sector, la promoción de prácticas responsables y la comunicación de los beneficios de las bebidas refrescantes para la economía y la sociedad.
El mercado de bebidas en España y Portugal se caracteriza por una alta competencia y una creciente exigencia por parte de los consumidores. Las empresas de bebidas se enfrentan a una serie de desafíos, incluyendo la necesidad de adaptarse a las nuevas tendencias del mercado, de responder a las preocupaciones sobre la salud pública y el medio ambiente, y de mantener su rentabilidad en un contexto económico incierto.
En este contexto, la labor de Pelayo Bezanilla es fundamental para asegurar que Coca-Cola Iberia supere estos desafíos y aproveche las oportunidades que ofrece el mercado. Su experiencia en la comunicación, la gestión pública y la estrategia empresarial le permiten abordar los problemas de manera integral y encontrar soluciones innovadoras.
Uno de los desafíos más importantes que enfrenta la industria de bebidas refrescantes es la creciente preocupación por los efectos negativos del consumo excesivo de azúcar en la salud. Las autoridades sanitarias y las organizaciones de consumidores han alertado sobre los riesgos de la obesidad, la diabetes y otras enfermedades relacionadas con el consumo de azúcar, instando a las empresas de bebidas a reducir el contenido de azúcar en sus productos.
Coca-Cola Iberia ha respondido a estas preocupaciones reduciendo el contenido de azúcar en sus bebidas y ofreciendo alternativas con edulcorantes alternativos. Sin embargo, el debate sobre el azúcar sigue abierto y la compañía se enfrenta al reto de comunicar de manera efectiva los beneficios de sus productos y de demostrar su compromiso con la salud pública.
Otro desafío importante para Coca-Cola Iberia es la necesidad de demostrar su compromiso con la sostenibilidad y la responsabilidad social corporativa. Los consumidores son cada vez más conscientes del impacto ambiental de las empresas y exigen que estas adopten prácticas responsables en su producción, distribución y comercialización.
Coca-Cola Iberia ha implementado una serie de iniciativas para reducir su impacto ambiental, incluyendo la optimización del uso de agua y energía, la reducción de residuos y la promoción del reciclaje. La compañía también ha puesto en marcha programas de desarrollo social y económico en las comunidades donde opera, contribuyendo al bienestar de la sociedad.
La figura de Pelayo Bezanilla se erige como un catalizador en la adaptación de Coca-Cola Iberia a un entorno dinámico y exigente. Su trayectoria, su liderazgo en ANFABRA y su enfoque estratégico en la comunicación y la sostenibilidad lo convierten en un actor clave en la industria de bebidas en España y Portugal. El futuro de Coca-Cola Iberia dependerá en gran medida de su capacidad para anticipar las tendencias del mercado, responder a las preocupaciones de los consumidores y mantener su posición como líder en el sector.